Es evidente que en esta última generación BMW puso énfasis en dotar al modelo de un más generoso y actualizado paquete tecnológico de ayuda al conductor, mejorando también los niveles de seguridad. Además del estacionamiento asistido, está equipado con un sistema que ofrece la posibilidad de que el auto retroceda por su cuenta hasta 50 metros copiando la trayectoria que hizo en marcha hacia adelante esquivando cualquier obstáculo; solo hay que estar atento al freno, del resto se encarga el sistema. También cuenta con mandos por voz que se activan mediante la grabación de “Hola BMW” por parte del conductor u otra frase corta a elección.

Todas estas innovaciones en el modelo se suman a un generoso equipamiento de serie que incluye butacas eléctricas con memorias, techo solar corredizo, climatizador de tres vías (con dosificación de temperatura poco eficiente), seis airbags, faros de LED delanteros y traseros, detector de cansancio, mantenimiento de carril, control de crucero con función de frenado y Head Up Display con proyección en el parabrisas.

El instrumental es digital con fondo oscuro y de impecable lectura que, además, ofrece distintas opciones de información. A esto se agrega el clásico dial del iDrive multifunción en la consola integrada por mandos del Start-Stop desconectable y teclas con funciones Confort, Individual, Sport y Sport+.

El equilibrio de las suspensiones es uno de los aspectos destacables en este nuevo 330i. El tránsito en ciudad no muestra falencias, y una de las razones es el no haber exagerado en la medida de las llantas (18”) con neumáticos de perfil 45 y banda de contacto de 225mm. Copia con decisión cualquier tipo de irregularidades sin transmitir vibraciones al interior, salvo en empedrados muy desparejos. Por otra parte, se muestra altamente eficiente en el comportamiento dinámico y en cambios de apoyo en zonas de curvas y contracurvas.

Estas características hacen que esta nueva Serie 3 manifieste una conducta de primer nivel que se traduce en una conducción agradable y segura con una cabina bien insonorizada y respuesta precisa de la dirección. La posición de manejo es la clásica de los BMW: pedalera al fondo, butacas de buena sujeción y amplio reglaje junto a la columna de dirección de doble regulación con un volante de buen tacto y levas de cambio de tamaño correcto. Cualquier humano encontrará la ubicación adecuada a sus características.

A la hora de las mediciones de performances, debo reconocer que me sorprendieron debido a que con 258 caballos declarados se logran registros que hacen pensar en una potencia mayor si se comparan los valores con modelos que ofrecen motorizaciones de 300 CV o más.