Mercedes-Benz 1.3 de 163 CV: downsizing en todo su esplendor

El propulsor del Clase B es idéntico al de su hermano A. Se trata de un cuatro en línea desarrollado en conjunto a Nissan-Renault, de 1.3 litros, inyección directa y turbocompresor de geometría variable. Entre sus innovaciones se encuentran los inyectores con seis micro-orificios que colocan el combustible en la cámara de combustión en hasta tres etapas con el fin de generar la mezcla necesaria según se oprima el acelerador gracias a la bomba que genera presiones de hasta 250 bar; un turbo de gases de escape con un válvula de derivación/descarga eléctrica; distribución variable electrónica en ambos árboles de levas; tapa de cilindros en formato “Delta” (foto), es decir, mantienen la fisonomía de un triángulo con el fin de integrar el colector de escape y la admisión para optimizar la eficiencia de la combustión.

 

Pero, sin dudas, la mayor novedad radica en la desconexión de los 2do y 3er cilindro cuando el M 282 está acoplado a la caja automática de doble embrague. Por primera vez Mercedes utiliza esta tecnología en un motor de 4 cilindros, que desacopla la mitad de ellos ante una baja demanda de prestaciones y siempre a velocidades constantes en el rango de 1.250 a 3.800 rpm. Así, las válvulas de entrada y salida del segundo y tercer cilindro se cierran mediante un ajuste de elevación del actuador de cada una de ellas. Genera 163 caballos y 250 Nm de torque, desarrollando una potencia de un 11% superior a la del anterior motor de 1,6 litros. Dato no menor: a pesar de contar con filtro de partículas para cumplir con la Norma Euro 6, puede utilizarse con nafta de 95 RON (Súper).

Consumos (litros/100 km)

A 100 km/h: 4,4 litros en D7 a 1.800 rpm

A 130 km/h: 6,2 litros en D7 a 2.350 rpm

Mixto: 6,1 litros

Urbano: 7,6 litros

Prestaciones

Aceleración: 8,7 segundos

Frenada 100-0 km/h: 41,1 metros/3,2 segundos

Frenada 130-0 km/h: 72,9 metros/4,2 segundos

Recuperaciones 80-120 km/h en D: 6,1 segundos